Plagas secundarias de la vid y especies bajo vigilancia
Con la modificación de las prácticas de protección fitosanitaria del viñedo, están reapareciendo ciertas plagas que alguna vez fueron nocivas pero que habían desaparecido con el control químico. Por tanto, es necesario conocerlos para saber cómo localizarlos.
Por otro lado, la introducción accidental en el territorio de plagas no autóctonas, pero conocidas por su actividad nociva, obliga a vigilarlas y por tanto conocerlas.
Finalmente, veranos muy calurosos e inviernos suaves favorecen el establecimiento o al menos la presencia episódica de plagas del sur que pueden perturbar el desarrollo de las cepas.
Actualmente, cinco riesgos emergentes para la salud están bajo vigilancia:
- el saltahojas Orientus ishidae, que ya se ha observado en Alsacia. Puede portar el fitoplasma de flavescencia dorée ;
- vectores potenciales de , distintos de madera negra Hyalesthes obsoletus ;
- el minador de hojas de la vid italiana ( Antispila oinophylla ). Es una mariposa originaria de América del Norte. Causa un gran daño en Italia porque la larva ataca las hojas y excava en las galerías del limbo. Es responsable de una pérdida significativa de área foliar;
- vectores potenciales de la enfermedad de Pierce causada por Xylella fastidiosa , una bacteria responsable transmitida principalmente por el saltahojas Homalodisca coagulata , que no está presente en Europa. Pero puede ser transmitido por varias otras especies endémicas de viñedos europeos.
Cryptoblabes gnidiella (Millière, 1867) (ficitis de la vid o polilla de la uva mediterránea, Lepidoptera, Pyralidae), es una plaga episódica que incluye a la oruga polífaga, que causa cada vez más daños en viñedos situados en el sur de Francia, cerca de la costa mediterránea. De hecho, esta oruga se siente atraída por la acumulación de azúcar y la descomposición. Por lo tanto, después de la cosecha, se puede encontrar en cantidades muy importantes en los racimos podridos que han quedado en la vid. Sin embargo, su presencia queda condicionada por las temperaturas invernales, debido a que este insecto es muy sensible a las heladas.
Entre los saltahojas y afines (insectos chupadores de picaduras), la Penthimia nigra (Goeze, 1778) (Hemiptera, Cicadellidae), frecuente en los encinos, es una especie polífaga, que antiguamente se describía como ocasionalmente dañina para la vid, por sus picaduras provocando las hojas se marchitan. Esta especie se considera más bien como una especie compañera (foto). Philaenus spumarius (Linnaeus 1758), el salivazo o philene espumoso (Hemiptera, Aphrophoridae), una especie muy polífaga (foto), es conocida por transmitir efectiva la enfermedad de Pierce de manera en Europa, pero solo en los olivos. Por sus profundas picaduras nutritivas, este insecto puede desorganizar los tejidos de las ramas jóvenes de la vid y puede provocar la desecación de estas.