Principales síntomas
Elsinoë ampelina es responsable de síntomas en las vides bastante comparables a los causados por excoriose , así que tenga cuidado.
- Hojas
Este hongo primero causa pequeñas manchas húmedas en las hojas jóvenes, de unos pocos milímetros de diámetro (1 a 4 mm) y de color marrón a marrón chocolate (Figuras 1 a 3). Estos son posteriormente circulares a angulares, se extienden progresivamente y pueden alcanzar medio centímetro (figura 4). Permanecen aislados o convergen y cubren sectores importantes del limbo (Figura 5). En ocasiones presentan un halo clorótico más o menos marcado.
Estos puntos a menudo se localizan a lo largo de las venas (Figura 2). Al final del desarrollo, los tejidos centrales tienden a necrodearse, aclararse (coloración blanco grisácea) (figura 6) y secarse. Eventualmente se caen, dando a la hoja una apariencia acribillada (Figura 7). En hojas jóvenes, cuando se desarrollan numerosas lesiones a lo largo de las nervaduras, se pueden observar deformaciones foliares más o menos severas y / o mortalidad.
- Brotes y ramitas jóvenes
Se forman lesiones localizadas y alargadas en ramitas herbáceas jóvenes que son particularmente sensibles; húmedas, de forma elíptica y de color variable entre marrón, negro y violeta, pueden modificar el desarrollo de los brotes jóvenes (Figura 8). Se extienden y progresan en profundidad hasta llegar a la médula. Al final del desarrollo, estas lesiones se extienden y se aclaran en su centro (figura 9); pueden dar lugar a cancros huecos más o menos marcados y severos, haciendo que las ramitas sean más quebradizas o provocando que se sequen y mueran (Figuras 10 y 11). Las lesiones en los pecíolos y zarcillos son idénticas (Figura 12). Estas lesiones se pueden observar en los bosques en invierno (figura 13).
Puede producirse confusión en el diagnóstico con daños por granizo.
- Racimos y bayas
Aparecen manchas marrones circulares y ligeramente cóncavas en las bayas jóvenes que interrumpen su crecimiento (Figura 14). Tienen forma de ojo de pájaro (los anglosajones hablan de podredumbre de ojo de pájaro); a veces más claros en su centro, tienen un color negro más bien violáceo en la periferia. Cuando se ataca temprano, los racimos jóvenes pueden volverse negros y secarse (Figuras 15-17).
Se observaron altas mortalidades de inflorescencias (figura 18) y ramitas.